Tras dejar atrás su querido Santa Rosa de Copán con una maleta cargada de sueños, Marisol Pérez emprendió un viaje que la llevaría desde las tierras hondureñas hasta Barcelona, donde se convertiría en la mano derecha del renombrado entrenador Luis Enrique.
Originaria de Concepción, Copán, Marisol ha destacado no solo por su dedicación y trabajo arduo, sino también por su gran corazón y espíritu luchador. Desde una edad temprana, se ha dedicado a una variedad de empleos, desde la cosecha de café hasta la atención al cliente, demostrando su determinación para alcanzar sus metas.
En Barcelona, no ha olvidado sus raíces, que la han impulsado a convertirse en la mano derecha de la familia de Luis Enrique.
Marisol Pérez, la mano derecha de la familia de Luis Enrique, inicio hace cinco años, trabaja junto a la familia de, brindando su apoyo en diversas labores, incluida la cocina, donde ha sorprendido al técnico del PSG con sus tacos mexicanos con el toque hondureño y delicias como nacatamales y café catracho.
Sin embargo, su contribución va más allá de las tareas domésticas. Marisol es un ejemplo de fortaleza y perseverancia, especialmente durante momentos difíciles, como cuando llegó a trabajar con la familia de Luis Enrique poco después de la trágica pérdida de su hija. Su presencia y apoyo han sido invaluables en momentos de dolor.
Además de su trabajo en la casa, Marisol ha tenido la oportunidad de disfrutar de partidos del FC Barcelona en el Camp Nou, cortesía de la familia de Luis Enrique. Para ella, estas experiencias son inolvidables y reflejan el profundo lazo que ha establecido con la familia que la ha acogido.
La historia de Marisol Pérez es un testimonio inspirador de cómo el trabajo arduo, la dedicación y la bondad pueden abrir puertas y trascender fronteras. Su trayectoria desde las tierras hondureñas hasta el escenario internacional del fútbol es un recordatorio de que los sueños pueden hacerse realidad con determinación y pasión.
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